En la Academia de la Guardia Civil en Baeza, un incidente de acoso entre compañeros sacudió la comunidad académica cuando un alumno fue sometido a semanas de vejaciones por parte de dos de sus compañeros. Este comportamiento hostil tuvo su origen en el éxito académico del estudiante acosado, quien estaba destacando por sus buenas notas en la 129º promoción del Cuerpo.
El caso se manejó con gran discreción, con la mayoría de la Academia desconociendo los detalles. Sin embargo, gracias a la rápida actuación del capitán de la compañía, se tomaron medidas inmediatas para abordar la situación. Tras ser informado de los hechos, el capitán amenazó con expulsar a los presuntos responsables y adoptar medidas disciplinarias, como la posible reducción de sus calificaciones personales, y por consiguiente, su descenso en el escalafón de la promoción.
Estas acciones han tenido un efecto disuasorio evidente, ya que desde entonces los acosadores no han vuelto a dirigirse a la víctima. Este caso, aunque tratado internamente y con discreción, destaca la importancia de abordar el acoso de manera firme y rápida en entornos académicos y profesionales, enviando un claro mensaje de intolerancia hacia este tipo de comportamientos y promoviendo un ambiente seguro y respetuoso para todos los estudiantes y profesionales.
Noticia extraída del diario Vozpópuli.