El Tribunal Superior de Justicia de Aragón ha ratificado la procedencia del despido de una trabajadora de limpieza que se autogolpeó y presentó falsas denuncias de agresión. Los hechos, ocurridos en enero de 2023 en las instalaciones de un importante grupo cárnico donde la empleada prestaba servicios de limpieza, llevaron a una serie de acontecimientos que culminaron en su cese en febrero del mismo año.
De acuerdo con la sentencia, la trabajadora, en medio de una discusión sobre la limpieza, se tiró al suelo y aparentemente se golpeó con la pared en la cabeza. El incidente provocó que su superior buscará corroborar los hechos con testigos, momento en el cual la limpiadora, lejos de colaborar, respondió desafiante.
Los acontecimientos tomaron un giro más grave cuando la empleada envió dos mensajes de voz a su encargado alegando que una compañera la estaba agrediendo. Sin embargo, la investigación reveló que el receptor de los mensajes y la supuesta agresora estaban reunidos en el momento de la presunta agresión, desacreditando así las alegaciones de la trabajadora.
Los magistrados recordaron que la limpiadora tenía antecedentes de mal comportamiento, habiendo sido sancionada en dos ocasiones previas. Estos antecedentes fortalecieron la narrativa que condujo al despido, desestimando así la posibilidad de tildar la sentencia de «errónea, arbitraria o irracional».
Noticia extraída de CincoDías.
