La Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Universitario La Paz en Madrid enfrenta una situación crítica, con la renuncia en bloque de todos los médicos que prestaban servicios en los últimos días. Este acontecimiento se debe a la reinstalación del jefe de servicio, quien había sido destituido en diciembre por la gerencia del hospital debido a acusaciones de acoso laboral, respaldadas por más de la mitad del personal médico.
A pesar de la decisión de destitución tomada en diciembre, un fallo judicial esta semana ha ordenado la reincorporación del jefe de servicio, generando una profunda insatisfacción y descontento en la plantilla médica. La consecuencia directa ha sido la dimisión masiva de los 11 facultativos, dejando la UCI operando con un único médico, el propio jefe de servicio.
La gravedad de esta situación ha obligado al traslado de los niños que se encontraban bajo cuidados intensivos en la unidad, debido a la escasez de personal médico. Aunque la Consejería de Sanidad sostiene que la unidad no será cerrada, confirma la reubicación de los pacientes en otras áreas del hospital como resultado de la falta de recursos humanos.
Noticia extraída del periódico El País.